domingo, 11 de agosto de 2013

La Cultura Vasca en el Exlio: New York (y 2)




Jesús de Galíndez nació en Amurrio (Álava-Araba) el 12 de octubre de 1915. Hijo de un médico oculista, al morir su madre se trasladó con toda la familia a Madrid. Estudió la carrera de Derecho en la Universidad Central (Complutense) de la misma capital. Fué en estos años cuando surgió en él un gran interés por todo lo relacionado con el País Vasco. Afiliado en 1932 al PNV, asistió asiduamente a los Cursos de Verano de Eusko Ikaskuntza-Sociedad de Estudios Vascos en Donostia-San Sebastián. Metido de lleno en la asociación Euzko Ikasle Batza. Se licenció en Derecho el 20 de junio de 1936 (tesis: "El caserío vasco") y, a continuación, ocupó en la misma facultad una plaza de profesor ayudante en la cátedra de Derecho Civil, de la que era profesor Felipe Sánchez Román. Al iniciarse la guerra civil española (18 de julio de 1936) se creó en Madrid un Comité-Delegación del Partido Nacionalista Vasco, encargado oficialmente de proteger a los vascos que residían en la capital de España. Desde el primer momento se puso al servicio del mismo, del cual llegaría a ser Agregado Jurídico y encargado de la Sección de Presos y Desaparecidos. Su labor humanitaria, en apoyo de la política del ministro vasco Manuel de Irujo, hizo que muchos encarcelados vascos (y no vascos) gozasen nuevamente de la libertad. Durante la permanencia de Irujo como ministro de Justicia, Jesús de Galíndez desempeñó el cargo de Letrado Asesor de la Dirección General de Prisiones. La última parte de la contienda la pasó incorporado a la Brigada Vasco-Pirenaica (142 Brigada Mixta). De esta época es su libro de poesía Ensueños. Treinta ensayos poéticos, Barcelona, 1938. Como tantos otros combatientes republicanos, el 10 de febrero de 1939 cruzaba la frontera francesa camino del exilio. Gracias a los servicios del Cónsul de la República Dominicana en Burdeos pudo embarcarse en dirección a dicha República, llegando a la misma el 19 de noviembre de 1939. En esta isla del Caribe permaneció por espacio de seis años, los cuales le habrían de dejar una huella indeleble para el resto de sus días.
Un año más tarde se puso al frente de la Delegación del Gobierno Vasco en Santo Domingo, coincidiendo con su labor de profesor de Ciencia Jurídica de la Escuela de Derecho Diplomático y Consular. Su capacidad de trabajo y dinamismo hizo que se le nombrara secretario del Instituto de Legislación Americana Comparada de la Universidad de Santo Domingo y, un año antes de su salida de la isla, se le designó Asesor Legal del Departamento Secretaría de Trabajo y Economía. Al mismo tiempo se multiplicaba en conferencias y colaboraciones en revistas ("Revista Jurídica Dominicana", "Clío", etc.). De esta época son los escritos siguientes: Los problemas actuales del matrimonio y el divorcio ante los conflictos de leyes, Buenos Aires, 1942; La aportación vasca al Derecho Internacional, Buenos Aires, 1942; Programa de elementos de ciencia jurídica, Ciudad Trujillo, 1945; Principales conflictos de leyes en la América actual, Buenos Aires, 1945; Los vascos en el Madrid sitiado. Memorias del Partido Nacionalista Vasco y de la Delegación de Euzkadi en Madrid, desde setiembre de 1936 a mayo de 1937, Buenos Aires, 1945. En 1944 consiguió el primer premio en un concurso literario organizado con motivo del Primer Centenario de la República Dominicana. El trabajo se titulaba El Bahoruco y fue publicado, junto con cuatro ensayos más, bajo el título Cinco leyendas del Trópico, Ciudad Trujillo, 1944.
El 31 de enero de 1946 abandonó la isla de Santo Domingo, instalándose días más tarde en Nueva York (13 de febrero). Allí se puso a trabajar en la Delegación Vasca y colaboró con el Gobierno republicano español en el exilio en los trabajos que hicieron que las Naciones Unidas condenaran el régimen recién implantado.
Entre tanto continúa su labor de escritor. En agosto de 1946 envía la comunicación Raíces vascas en la doctrina del P. Vitoria al I Congreso Vitoriano, celebrado en Buenos Aires. En 1947 publica la obra El derecho vasco, Buenos Aires. Este mismo año sale de imprenta Divorce in the America, Búffalo, escrita en colaboración con Ireland. En el II Congreso de Escritores Vascos, organizado por la revista "Euzkadi" de Caracas, consigue el premio con su trabajo La revolución francesa repercute en Euzkadi. En 1948 viajó a Europa para tomar parte en el Congreso Internacional de Estudios Vascos y en la Asamblea General de las Naciones Unidas, que iba a tener lugar en París. Al Congreso aportó los siguientes trabajos: Un siglo de lucha por la libertad vasca; Valor de los Fueros Vascos considerados según las circunstancias históricas que les dieron origen; Los vascos en la lucha por la libertad de América; Semejanza entre los Fueros de Ayala y Bizcaya. Vuelto a Nueva York (1949), quedará al frente de la Delegación Vasca. Este mismo año aparecerá su escrito El divorcio en el derecho comparado de América, México, 1949. Su trabajo aumenta en gran manera. De todas partes le piden conferencias, comunicaciones, colaboraciones para periódicos, etc. Publica la obra Estampas de la guerra, Buenos Aires, 1951. Envió una comunicación sobre Protección de algunos derechos humanos en documentos Constitucionales Vascos, especialmente de los siglos XV y XVI, a la Conferencia Internacional de la "International Bar Association", celebrada en Londres. Poco después logró un premio especial en los Juegos Florales Catalanes de Nueva York, con su trabajo La Confederación del Pirineo, en la época del Príncipe Carlos de Viana y de Gerona. Por las mismas fechas se le nombraba profesor de Derecho Público Hispanoamericano y de Historia de la Civilización Iberoamericana, en la Universidad de Columbia; da a la imprenta un nuevo escrito, La inestabilidad constitucional en el derecho comparado de Latinoamérica, México, 1952, y al final del curso universitario hace un nuevo viaje a Europa. Su nuevo curso versó sobre La civilización hispanoamericana, política y cultural. Pronuncia gran número de conferencias, colabora en "Excelsior", de México, y se le nombra secretario del Comité Ejecutivo de la Asociación de Profesores Universitarios sobre temas de Hispanoamérica. En 1953 aparece su escrito Nueva Fórmula de Autodeterminación política de Puerto Rico (México) y un año más tarde el volumen Iberoamérica>. Su evolución política, socio-económica, cultural e internacional, Nueva York, 1954. Esta documentada obra produjo escándalo en algunos medios, sobre todo en la República Dominicana, donde pronto se publica un folleto contra el libro y su autor. Metido de lleno en las actividades públicas neoyorquinas, fue presidente durante dos años (hasta la Junta de 1956) del Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos, y Secretario de Publicidad de la Federación de Sociedades. En estos años cursó también la carrera de Filosofía, cuya tesis doctoral versó sobre La era de Trujillo: un estudio casuístico de dictadura hispanoamericana, que fue aceptada formalmente por la Universidad de Columbia el 27 de febrero de 1956.



 En ella hace un estudio documentado de la dictadura trujillista en la República Dominicana. Días más tarde (12 de marzo), Jesús de Galíndez desaparecía de forma misteriosa, como tantos otros elementos que se atrevieron a atacar el régimen de Trujillo. El acontecimiento causó conmoción en el mundo entero. Ya desde el 1946 vivió preocupado por su destino final, como lo prueban ciertas declaraciones hechas a sus amigos. El 5 de junio de 1956 en ceremonia solemne, la Universidad de Columbia le otorgó "in absentia", el grado de Doctor en Filosofía. Su tesis sería publicada el mismo año en Santiago de Chile.
Colaboró en gran número de publicaciones, entre ellas: "Eusko Jakintza", "B. A. de E. V.", "Revista de América", "Ibérica", "Hogar", "Cuadernos Americanos", "Gernika", "América", “España Libre”…

Jon Oñatibia y Jesús de Galíndez con los dantzaris  de Nueva York, 1950

Jon Oñatibia había nacido en Oiartzun, Gipuzkoa, el 24 de noviembre de 1911. Estudió derecho en Zaragoza donde se licenció, aunque nunca ejerció como abogado. Entre 1937 y 1939 formó parte del grupo Eresoinka con el que actuó en Francia, Bélgica, Holanda e Inglaterra. En 1940, se exilió en Caracas y, en 1941, comenzó su propia carrera musical. Estudió en el Conservatorio de Caracas y acabó  convirtiéndose en el director del mismo.
El 27 de agosto de 1946, se trasladó a Estados Unidos. Entre 1947 y 1950, estudió en el New York College of Music, tomando cursos de composición, órgano, canto gregoriano,… Trabajó para llevar la música religiosa a la máxima expresión, bien como instrumentista (piano y órgano) o a través de los coros que ha dirigido en las iglesias de Saint Ignatius y La Milagrosa. Pero, a Oñatibia se le deben dos iniciativas culturales más: la edición del periódico Argia en lengua vasca y el grupo Euzkadi.
De su etapa neoyorquina nos queda Neke ta Poz. Erbesteratu baten oroitzapenak (Fatiga y alegría. Recuerdos de un desterrado),  Donostia, 1983[1]. Se trata de unas memorias noveladas que tienen una fuerza especial. Además, son un magnífico retrato de la vida de un exiliado/emigrante que trata de abrirse camino en la gran ciudad.




Oñatibia grabó en 1954 un disco de música vasca (txistu y canto) producido y grabado por Moses Asch en la legendaria Folkways (en la que grabaron, entre otros, Woody Guthrie, Pete Seeger,  Phill Ochs,…)[2].






[1] Hay una traducción al castellano de Jesús Iturriotz.
[2] http://media.smithsonianfolkways.org/liner_notes/folkways/FW06830.pdf

1 comentario:

AMUM dijo...

Fue autor del primer método de aprendizaje radiofónico de Euskara.
Garbiñe larrazabal